Casi sin arcenes, llena de curvas y, lo que es aún más peligroso, sin ninguna iluminación por la noche, así se encuentra el único vial de acceso al Hospital Marina Baixa.

Casi sin arcenes, llena de curvas y, lo que es aún más peligroso, sin ninguna iluminación por la noche, así se encuentra el único vial de acceso al Hospital Marina Baixa. La avenida del alcalde Jaume Botella, más conocida como carretera del Hospital, parece haber sucumbido a la ola de recortes y su alumbrado público no se conecta por la noche, a pesar de tratarse de un vial por el que circulan no sólo todos aquellos vehículos de usuarios que han de acudir a alguna Urgencia o los familiares que vuelven a casa una vez concluye el horario de visitas a los pacientes, sino también, por el que han de circular ambulancias y vehículos de emergencias a toda velocidad en caso de producirse algún accidente. 

La peligrosidad de la vía, sin embargo, se acrecienta aún más debido a que la pintura del vial no es reflectante, lo que impide visualizar correctamente los límites de la carretera. Los conductores que circulen por ésta en horario nocturno, difícilmente pueden distinguir las líneas que demarcan los arcenes al no ser reflectantes de manera que tienen que intuir los bordes de la carretera y el final del carril por el que han de circular. Ni que decir tiene que en tal estado transitar a pie por los alrededores del centro hospitalario es misión completamente imposible. 

El vial lleva años sin remodelarse, sigue sin contar con ninguna acera y los arcenes, además de ser bastante reducidos, se encuentran en mal estado, con zonas sin pavimentar o con el asfaltado en avanzado estado de deteriorado. La única medida de seguridad apreciable en todo el tramo es una señalización vertical, a la llegada del recinto del Hospital, que limita la velocidad a 20 kilómetros por hora e informa a los conductores que circulen por la carretera de que van a entrar en una zona hospitalaria.

El trazado, que presenta múltiples curvas, también contribuye a aumentar el problema. De hecho, el problema es bien conocido pues una de las argumentaciones que con más vehemencia empleó la administración autonómica cuando intentó privatizar el parking del Hospital y obligar sí o sí a todos los pacientes de la Marina Baixa y trabajadores del centro hospitalario a pagar por dejar el coche, era que la empresa iba a hacerse cargo de la tan necesaria remodelación de los accesos al Hospital, precisamente porque las ambulancias no podían circular en tales condiciones. La suma necesidad de esas reformas parece haber quedado en saco roto ya que años después de haberse abandonado el proyecto ante la abrumadora oposición de la opinión pública, el vial no ha sido remodelado, aunque se hayan realizado algunas mejoras en la zona.

Los Jóvenes Socialistas de La Vila exigen que se ilumine de inmediato.

Los jóvenes socialistas de La Vila Joiosa exigieron ayer mediante un comunicado de prensa al equipo de gobierno local que encienda de inmediato las farolas del acceso al centro hospitalario. "Es cierto que estamos en una época en la que puede que se realicen cortes de suministro a determinadas zonas para el ahorro energético", señalaron los socialistas que, sin embargo, lamentaron el "grave peligro" que supone para los usuarios de la vía de acceso al Hospital que no tenga ni una sola luz por la noche. "Las farolas, en toda la extensión de la avenida, no funcionan, produciendo un grave peligro a los usuarios", insistieron y añadieron que se trata de "una de las calles más importantes de la comarca pues ambulancias, y coches con urgencia, procedentes de cualquier población de la Marina Baixa deben transitar por dicho vial a velocidades moderadamente altas causando alto riesgo de accidente cuando viajan de noche". Los Joves Socialistes solicitan al equipo de gobierno que restituya el suministro eléctrico en la avenida "sea cual fuere la causa que impide la iluminación de la zona" o que "instale dispositivos "ojo de gato" en los límites del arcén para definir el trazado de la vía".

Fuente: Diarioinformación